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Día del amigo: el valor de la amistad

La amistad es una virtud para compartir

La amistad es una virtud para compartir

Por Víctor Bruzzoni*
Redactor especial

Este año recae en día domingo.   Arraigado en la cultura argentina el 20 de julio se reserva para festejar el Día del Amigo. En realidad, la amistad es un tema de la filosofía occidental. Está planteada como un ideal ético. Como la relación humana más preciada porque está libre de cualquier otro fin que no sea su desarrollo. El antiguo filosofo Aristóteles la individualizó como “la unión recíproca y desinteresada de dos personas virtuosas” (Ética a Nicómaco, Cap. VIII.).

Nietzsche, quizás más realista la aceptó, pero planteó su posible ruptura. Los amigos también rompen, entran en conflicto, sostuvo. Y quizás se refería a que se trata de medir bien quiénes pueden ser nuestros amigos para también saber quiénes pueden ser nuestros enemigos. Y no perpetuarnos en fotos edulcoradas, engañosas de lo que puede ser la real amistad.

En cambio, Epicuro, el antiguo filósofo empirista, propuso: “Bueno, algo más necesario que el amigo no hay nada”. Porque, precisamente, la vida en amistad es una de las vías para perder el miedo. El miedo a la soledad, al sufrimiento, a los dioses. Es decir, en definitiva, a poderes que no podemos controlar.

Así nació la celebración

Ahora bien, los tiempos han cambiado. Y se alerta que en la actualidad el desarrollo de las redes sociales, el hedonismo y la falta de tiempo de las personas, afectan el noble sentimiento de la amistad. Tiempos de miedos e incertidumbre sobrevuelan y erosionan las relaciones humanas. Se reduce entonces el sentido de la amistad a una idea de amparo, de ayuda.

Pero ¿Por qué se celebra este día?  La historia comenzó cuando un odontólogo y humanista de Lomas de Zamora, Enrique Ernesto Febraro, miembro del Rotary Club, tomó para el festejo la llegada a la luna de la Apolo ll (expedición comandada por la NASA), el 20 de julio de 1969. Considerada como una de las hazañas más importantes del hombre, inspirada en la cooperación y compañerismo de las personas.

Febraro envió cientos de cartas que resaltaban el gesto de amistad de la humanidad hacia al universo. Años más tarde, en 1983, la provincia de Buenos Aires tomó la iniciativa y, por ejemplo, consideró la ciudad de Lomas de Zamora como la “capital de la amistad”. Esto produjo que otros países también se unieran a la celebración. Caso de Brasil, Chile, España y Uruguay.

Febraro fue nominado en reiteradas oportunidades para el Premio Nobel de la Paz. Al igual que Borges no lo consiguió. La CABA lo nombró “Ciudadano Ilustre” en 1989. Y en 2003, la Cámara de Diputados de la Nación lo declaró “Notable Argentino”. Así, se fue afianzando el día del amigo rápidamente, no solo en la Argentina sino en el exterior.

Amistad: virtud para compartir

El libro de mi autoría, El valor de la Amistad, dirigido a un amigo y prologado por Febraro. resume el concepto de amigo simplemente: “amistad es una virtud para compartir”. En pocas palabras, resume algo grande, como una especie de amor incondicional sin objetivos que se define por sí mismo (no representa romance, ni relación familiar, profesional, ni coyuntural). Es lo que escapa a la grieta aristotélica en una épica moral que se lleva a cabo intercambiando una relación libre de otro fin, aunque cargada de afecto.

¿Es útil entonces su desarrollo? Claro que sí. Hace a la salud mental, la solidaridad, a la sinceridad de las relaciones y a la longevidad. No se es amigo de la misma manera en todos los lugares y épocas. Una amistad no es un contacto. Internet y las redes sociales han ampliado nuestras posibilidades de conexión, pero son un modelo de comunicación que prioriza lo inmediato

¿Sigue siendo amigo nuestro alguien que hace mucho tiempo que no contesta a nuestro último WhatsApp? Invitemos a nuestros amigos a compartir momentos. Quizá, algún día, pensemos como Alberto Cortez: “A mis amigos les adeudo la ternura y las palabras de aliento y el abrazo, el compartir con todos ellos la factura que nos presenta la vida paso a paso (…)”.

*Abogado. Ex juez del fuero laboral

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