Por Guillermo Di Menna*
Roberto Tito Vallejos, Anoche tarde me enteré de que habías fallecido. A 40 años de sus denuncias ambientales, muy poco a cambiado en esta Argentina que nos duele. Quizas muchas personas, muchos vecinos de Vicente López no lo hayan conocido. Aquellos que tuvimos el honor de conocerlo, vimos en su hacer cotidiano como hombre público, un ejemplo a seguir.
Eran tiempos cuando el vecino se indignaba por los hechos de corrupción ventilados por él como edil. Dichos hechos causaban estupor y repulsión en la comunidad. La gente sana y con principios, veía y cuestionaba al cuerpo legislativo municipal, por no investigar y proceder a tapar a como de lugar la corrupción.
Hasta incluso con su expulsión del cuerpo del Concejo Deliberante. Vallejos era alguien que representaba realmente a los vecinos. Y llevaba adelante la obligación de que el Concejo sea un órgano de contralor de los intereses del vecino. Muchas voces anónimas, de entonces, se alzaron clamando justicia y repudiando la salida forzada de Vallejos.
El concejal vallejos era alguien que solo estaba haciendo el bien y honrando con hidalguia y con mayúsculas su cargo de concejal. Ojala Tito, no debamos coincidir con las palabras de Carlos Nino » Argentina un país al margen de la ley» y tu ejemplo y compromiso con el la verdad hagan mella en las futuras generaciones y veamos renacer una Argentina que merezca ser vivida. Gracias por tu vida. Q.E.P.D. Roberto Tito Vallejos.
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