Ante un recinto colmado de vecinos y vecinas, y su gabinete en primera fila, delante de las y los concejales, el intendente, Julio Zamora, inauguró las sesiones ordinarias del Concejo Deliberante ayer martes. Desarrollo urbano, salud, seguridad ciudadana, infancia y educación, y movilidad y transporte estuvieron entre las prioridades que anunció para lo que consideró “un año complejo”. El intendente aseguró que sigue adelante con el hospital de agudos; pero analizará las prioridades pues está obligado a “hacer esfuerzos desde el punto de vista económico”, por el contexto crítico.

Zamora es un intendente que valora la política de cercanía. Así como en una plaza se queda hablando con un vecino que le acerca un planteo o un pedido. Ayer martes, en la apertura de sesiones del Deliberativo, antes de dar paso al tema político y de gestión saludó por su cumpleaños a la concejala opositora, Vanina Pignata.
En su discurso el intendente definió el actual como “un año complejo”. Observaba el panorama nacional. Y su tono también fue autocritico, no en lo personal, sino en su rol de dirigente político. Pues consideró que el actual contexto político no se produjo por generación espontánea, sino por una “gran deuda de la política con la democracia”.
De su propia experiencia en la última campaña electoral llegó a la conclusión de que promoverá en el distrito “la boleta única papel” para “transparentar el proceso democrático”. Luego consideró que “Estamos en un cambio de época”; y con una “situación económica que nos complica y nos aqueja”, enfatizó.
La salud: prioridad

Zamora no hizo referencia a que hablaba de la gestión nacional. Pero sin duda se refería a ella. “Expreso mi solidaridad a muchos despedidos”, –nombró la Agencia Nacional de Noticias Télam por caso- “que en muchos lugares (…) por castigar ciertas prácticas políticas, se deja de lado lo humano (…) y no se evalúa al trabajador como corresponde”.
El intendente valoró la articulación con Nación durante la gestión nacional anterior. Reafirmó que va a continuar adelante con la construcción del hospital de agudos, aunque aclaró que aún no le llegan apoyos ni de Provincia ni del gobierno nacional en el proyecto. “La salud va a seguir siendo nuestra prioridad”, definió en esta línea Zamora.
Luego aseveró que mientras la comuna tiene un hospital pediátrico de referencia; funcionan los hospitales de diagnóstico inmediato (Benavidez, Don Torcuato); y está en marcha -y con los fondos para terminarlo- el servicio de hemodinamia en el centro municipal Nores, “nos queda pendiente la atención de nuestros adultos”.
El intendente aprovechó la tribuna y el ámbito, con los representantes del pueblo, para revelar el problema de las isleños con el agua potable. Explicó que desde la pandemia y posteriormente Aysa aseguraba agua potable en las islas. Sin embargo, en la gestión Milei, la empresa habría desactivado el servicio, en el marco de los ajustes y recortes.
Zamora reconoció que aún no había abordado el tema a fondo, pero exteriorizó su preocupación. “(…) Los isleños podrían dejar de recibir el agua potable que distribuye AySA, lo cual provocaría un gran conflicto. Hay que poner en agenda este tema; me voy a comunicar con las nuevas autoridades nacionales”, informó.
Mujeres géneros e infancia

Por otro lado, confirmó las políticas locales de la Secretaría de Mujeres Géneros e Infancia “Su trabajo se ratifica en las casas convivenciales. Tanto para la niñez como para mujeres en situación vulnerada. Es una tarea que no tiene mucha visibilidad, pero (…) que permite atender y contener distintas situaciones que son muy dolorosas”.
Destacó la tarea del Consejo de Infancia para solucionar, no solo cuestiones educativas sino alimentarias de los niños y niñas. Mencionó el acompañamiento del municipio a más de 200 comedores y merenderos. Y calculó que el municipio capacita para el empleo “a más de mil vecinos por año en oficios en conjunto con la UTN”.
El intendente explicó que su gestión tiene tres ejes de desarrollo para el distrito: el industrial, el comercial y el turístico. Observó un “horizonte próximo” crítico por las erráticas políticas de libre mercado. Y anunció la continuidad de políticas de capacitación para el empleo y de las políticas de inclusión social.
“Vamos a seguir con las políticas de inclusión”, afirmó Zamora. Entre las prioridades de gestión enumeró desarrollo urbano, salud, seguridad ciudadana, infancia y educación, y movilidad y transporte. Aunque su tono no fue de crítica extrema, sino reflexivo y de planteo, no eludió cuestiones que vislumbra como amenazas al municipio.
Por caso, no pasó por alto la situación en torno al Fondo Educativo que adeuda a la provincia el gobierno nacional, más allá de los anuncios. Y reveló, por ejemplo, que en Tigre corren riesgo de no poder solventarse las clases de ajedrez en las escuelas. Y programa Tigre Educa, que beca estudiantes terciarios y universitarios.
Desarrollo urbano

En desarrollo urbano reconoció que “empezamos a escuchar voces que disienten con algún edificio, construcción. Entonces tenemos que poner los oídos sobre la tierra, charlar con nuestros vecinos y ser muy sinceros a la hora de decidir”. Aquí convocó a los concejales a ser parte del debate para la elaboración de un código urbano.
En otro orden de cosas, anunció que se terminará la construcción de las escuelas EP Nº 23 en Don Torcuato, y ES Nº 47 en Benavídez. Y se construirán las primarias Nº 54, en el barrio La Mascota, de Benavidez; y Nº 39, en Rincón de Milberg. También recordó la marcha de la pista de atletismo homologada, en el Polideportivo Sarmiento.
Y anunció que estaba confirmada la obra del puente sobre el Canal Aliviador, para mejorar el tránsito de la Ruta 27. Este proyecto se realiza mediante un convenio con el barrio privado Nordelta. Pero puso de relieve que, por el impacto de la crisis, la gestión analizaba las prioridades, pues indudablemente los recursos van a mermar.
Diálogo no insultos

“La situación de la Argentina amerita el diálogo (…) que las diferencias se puedan resolver en común. Hay cuestiones en las que podemos coincidir y otras en las que disentimos. Es importante que lo podamos decir con total respeto. Eso creo que es fundamental para la construcción de una democracia plena”, expresó Zamora.
Tras una intervención de alrededor de 45 minutos, Zamora reconoció que el municipio “se ve obligado a hacer esfuerzos desde el punto de vista económico”. Aseguró que “hemos tomado recaudos para darle a la gestión municipal la mayor austeridad posible”. Y valoró: “somos un municipio que tiene toda la energía”.
El intendente convocó a las y los ediles en su conjunto. Y a la vecindad. “Construyamos ciudadanía, democracia. Dejemos de lado la subestimación de las y los dirigentes (políticos), los enfrentamientos estériles e insultos. Dialoguemos (…) Iniciemos el camino (…) para hacer las transformaciones que necesita nuestra comunidad”.
Dejar una respuesta