Fue uno de los temas de la semana que termina. La justicia británica dio vía libre formalmente para que el fundador de WikiLeaks, Julian Assange, marche preso a los Estados Unidos. Parece que los campeones de la libertad tienen unas pequeñas groseras contradicciones. Assage hizo público lo que el poder escondía, ese parece ser su “delito”. En esta nota referencial la columnista Karin Silvina Hiebaum informó sobre la decisión del tribunal londinense, el último miércoles 20 de abril, el mismo día de la aprobación de la extradición.
Por Karin Silvina Hiebaum*
La justicia británica ha aprobado formalmente la extradición del fundador de WikiLeaks, Julian Assange, a Estados Unidos, donde se enfrenta a una condena de cadena perpetua por publicar documentos secretos sobre las guerras de Irak y Afganistán. Un tribunal londinense emitió la orden de extradición, que, sin embargo, tiene que ser aprobada por la ministra de Interior británica, Priti Patel.
Los abogados de Assange ya han anunciado que recurrirán la decisión de Patel si ésta les da la razón; y que podrían recurrir otros aspectos del caso. A mediados de marzo último, el Tribunal Supremo del Reino Unido había decidido no tramitar el recurso de Assange contra su extradición.
El tribunal dijo que la solicitud «no planteaba ningún punto de derecho controvertido». El equipo jurídico de Assange había anunciado entonces el lanzamiento de un recurso independiente. Assange está acusado de espionaje en los Estados Unidos de Norteamérica.
Información explosiva
Allí, Assange está acusado de la publicación de cientos de miles de documentos secretos en la plataforma de divulgación WikiLeaks. Sobre las guerras de Irak y Afganistán. Los documentos contenían información explosiva sobre las operaciones estadounidenses en estos países, incluida la matanza de civiles y el maltrato de prisioneros.
La organización Reporteros sin Fronteras pidió la liberación del fundador de WikiLeaks. «Pedimos al ministro del Interior que actúe en consonancia con el compromiso de Gran Bretaña de defender la libertad de prensa y se niegue a extraditarlo», declaró la representante de la organización en Londres.
Rebecca Vincent, de ella se trata, dijo asimismo que Assange, que lleva más de tres años encarcelado, debe ser liberado inmediatamente. Si Estados Unidos lo condena, Assange se enfrentará a hasta 175 años de prisión.
*Karin Silvina Hiebaum Mgter. Psicóloga y Comunicadora Social, residente en Viena
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