Por Víctor Bruzzoni*
Redactor Especial
Continúan declarando los testigos en la Causa Maradona. Desde la Justicia se intenta esclarecer la verdad de los sucesos de su muerte. Dicen en los pasillos de tribunales que los testigos son “los ojos y oídos” del juez. Es verdad. Las declaraciones públicas deben ser matizadas, adaptadas al caso, con el fin de encontrar la verdad jurídica para destapar posibles responsables y proceder acorde a la ley.
El Juez, entonces, debe determinar en la sentencia la eficacia o ineficacia de la prueba sobre los hechos alegados por las partes. Interpretar y entender los procesos mentales de los testimonios no es fácil. Poco se sabe de que hay diferentes maneras de atestiguar. La más común en las causas penales es el testigo presencial, que ha visto u oído los hechos, caso por ejemplo de Dalma, la hija de Maradona.
Están los testigos de carácter. Estos pueden hablar sobre la reputación o personalidad de una persona y o profesional involucrada en el caso. Este fue el caso de la doctora Ana Marcela Waisman Campos, que estuvo en contacto con el equipo médico de Maradona durante su internación en la Clínica Olivos. La médica se refirió a su comunicación con la psiquiatra de Maradona Agustina Cosachov.
El audio y la protección
Sobre esto último, Waisman Campos relató que intercambiaron opiniones del caso del exfutbolista. En la audiencia, avaló la forma y contenido del tratamiento médico de su colega. Precisó que visitó al astro del fútbol en la clínica, pero que este se negó a la prestación de sus servicios. Durante la audiencia, se dieron a conocer conversaciones entre ambas profesionales sobre cuestiones médicas.
Se reprodujo un audio enviado el 10-11-20200 por Cosachov, al médico de cabecera de Maradona, Leopoldo Luque. Allí ella mencionaba una recomendación de Waisman Campos -tips, la definió- sobre la protección legal por su intervención profesional y la del médico de cabecera en la decisión de la internación domiciliaria. Para poner en cabeza de los familiares, la decisión, ante diferentes opciones.
El material fue expuesto en la duodécima audiencia oral. Lo propio hicieron los dos administrativos contratados por la prepaga, Enrique Esteban Barrios y Germán Dornelli, que declararon sobre la gestión de los servicios de cuidado domiciliario que requería el Diez tras la externación del sanatorio. En concreto sobre las condiciones de la vivienda y el efectivo tratamiento médico.
El médico Luque
Otro tópico tratado fue en torno al médico Luque. Al que se le atribuye haber registrado, falsamente, que llevó a cabo la última operación del ídolo. El cirujano Rodolfo Benvenuti (52), del equipo de operación con más de 25 años de experiencia, dijo que el exabogado, e íntimo amigo de Maradona, Víctor Stinfale, lo convocó para evaluar si Luque era el indicado para operar al exfutbolista del hematoma subdural.
El Jefe de Cardiología de la Clínica Olivos tampoco estuvo ausente. Sebastián Nanin (54), sostuvo que él ofreció a Luque el traslado de Diego a la clínica. Dijo que, estable, Diego fue operado, a las pocas horas de llegar, “sin arritmias” aclaró. Luego respondió preguntas de los abogados intervinientes. Y realizó aclaraciones de orden cardiovascular, de su especialidad, con relación al paciente tratado.
La información de los testigos, hasta el momento, indica que, mientras el exfutbolista se recuperaba en la clínica, se llevó a cabo una reunión entre familiares, médicos de la clínica, de la prepaga Swiss Medical, Luque y Cosachov en la que se plantearon dos caminos: continuar el tratamiento en una clínica de rehabilitación o hacerlo en una casa, con internación domiciliaria. Este último fue el destino de Diego.
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