En su columna el abogado Bruzzoni describe distancias y cercanías entre los últimos dos papas. Hoy falleció el Papa Francisco (1936-2025) a los 88 años. Bruzzoni trae a colación la película inglesa, Los dos Papas, dirigida por Fernando Meirelles; con guión de Anthony McCart. El columnista, por ejemplo, rescata que Francisco siempre se manifestó en defensa de los pobres, contra las consecuencias del cambio climático y las guerras. Y que Benedicto XVI afrontó con energía los casos de pedofilia puertas adentro de la Iglesia y Francisco prosiguió ese camino profundizándolo.
Por Víctor Bruzzoni*
Redactor especial
Los Papas Francisco y Benedicto XVI (emérito) se encontraron en varias ocasiones, tanto públicas como privadas. Entre sus encuentros, el último fue el 28 de diciembre de 2022. La película «Los dos papas» (Meirelles 2019) sobre Benedicto XVI y Francisco se apoya en esos contactos entre los religiosos.
Aunque pareciera ser que aquel es más duro que su sucesor. Deja por consecuencia una pregunta: cuánto hay de verdad y cuánto de ficción en los dichos y pensamientos de estos pastores que representan y guían a millones de católicos en el mundo.
Ambos, cuando asumieron no sólo tuvieron la carga sobre sus espaldas de las profusas internas del catolicismo. Sino también las del del dominio de la política religiosa, y, desde ya, el problema de los abusos sexuales cometidos por miembros del clero.
Nadie negará que Benedicto se convirtió en el primer Papa en afrontar con energía el flagelo de la pedofilia dentro de la Iglesia. Con él comenzaron a delinearse los protocolos de actuación ante una denuncia (separación del cura frente a la denuncia judicial por ejemplo). Que luego Francisco profundizará.
“Anthony McCarten (…) desafía la visión monolítica
de la Iglesia Católica”
Francisco también cargo su dolor por no haber hecho lo suficiente para salvar a sacerdotes y laicos en la última dictadura en la Argentina. El historiador mendocino Aldo Duzdevich relata en su libro, Salvados por Francisco, 25 casos de personas escondidas y ayudadas a salir del país por el entonces padre Bergoglio,
El escritor y guionista de Los dos Papas, Anthony McCarten, presenta una obra que es un testimonio literario. Y desafía la visión monolítica de la Iglesia Católica, al mostrar la pluralidad de opiniones y el debate interno que existe puertas adentro. Se centra en la renuncia de Benedicto XVI un acontecimiento sin precedentes.
Tras más de seiscientos años de historia papal, la renuncia puso fin a un pontificado que parecía destinado a perdurar. McCarten no solo se sumerge en las causas que llevaron a este giro histórico. Sino que también explora la relación entre el Papa emérito (doctrinal y conservador) y su sucesor Francisco (pastoral y reformista).
McCarten construye figuras diametralmente opuestas en términos de personalidad, enfoque y visión de la Iglesia. Traza un relato que captura la complejidad de sus decisiones y las tensiones que emergieron entre ellos. Una especie de diálogo ficcional pone el ojo en diferencias ideológicas y distintas visiones.
La visión reformadora de Francisco
Las visiones sobre el futuro de la Iglesia se enfrentan. Mientras los destinos de dos hombres de fe, una extraña pareja de hombres diferentes, convergen e influyen profundamente el uno en el otro. Todo a pesar de los lastres de ambos. Como resultado, el autor logra humanizar a las figuras papales.
Muestra sus dudas, miedos, y deseos. En lugar de presentar a Benedicto XVI y Francisco como símbolos distantes, la prosa que desarrolla el autor neozelandés le permite al lector comprender las razones que sustentan las decisiones y las luchas internas de ambos líderes de la Iglesia Católica mundial. .
Por ejemplo, la dimisión de Benedicto XVI, que muchos evaluaron como una señal de debilidad. O como una traición a la tradición eclesial. Se explica en el contexto de su salud quebrantada y su incapacidad para enfrentar los retos de un mundo en rápido y constante cambio.
En contraposición, el Papa Francisco -primer jesuita y primer latinoamericano en el cargo- emergió como un líder con una visión reformadora. Dispuesto a llevar a la Iglesia en una dirección más abierta y contemporánea. Pero, sin duda, el tiempo y las ocupaciones también lo atravesaron.
“Francisco siempre se manifestó en defensa de los pobres, contra las consecuencias del cambio climático y las guerras”
Los vicarios de Cristo, no solo ofrecen distintos aspectos del ámbito eclesiástico. Sino que, a la vez, también plantean interrogantes universales sobre la autoridad, la lucha entre lo viejo y lo nuevo, y la capacidad de los seres humanos para tomar decisiones difíciles en circunstancias extremas.
Esa reflexión sobre la fe y el poder tiene un alcance global. Dado el protagonismo que la Iglesia ha tenido en la historia de la humanidad. Y el impacto que sus decisiones tienen en la vida cotidiana de millones de personas. Ahora ha fallecido uno de ellos, el Papa Francisco luego de doce años de pontificado.
Francisco siempre se manifestó en defensa de los pobres, contra las consecuencias del cambio climático y las guerras. Además de haber impulsado varios cambios en la Iglesia para permitir una mayor transparencia, especialmente a nivel financiero. Evitar los abusos de menores y dar un espacio más importante a las mujeres.
Y seguramente, tras su reaparición pública en Semana Santa, luego de su internación, él habría querido continuar con todos estos hechos de su pontificado. Pero sobrevino la muerte. Y esos hechos deben ser evidenciados, no por él, sino para que la gente no se olvide de que la Iglesia debe seguir dando pasos adelante.
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