Fue un acto de memoria que se repite en cada inicio de primavera. Mariano Witis, de 23 años, fue asesinado por el gatillo fácil policial en el año 2.000. Sus padres, Raquel y Jorge Witis, y sus amigos, compañeros, lo recuerdan siempre con música. Este año el escultor, Martín Graziano, le dedicó una obra, El Principito, y la comuna dio el visto bueno para que se instale en la plaza 9 de Julio, de Martínez, un lugar donde Mariano pasó gratos momentos de su infancia. Ayer sábado se inauguró, y como todos los años, la música también le dijo presente. Su maestro, el barítono, Martín Caltabiano, coreuta del Coro Polifónico Nacional, le dedicó un tema, y hubo más.
El barítono, Martín Caltabiano, maestro de coro de Mariano, le dedicó un tema muy sentido y dirigió al Coro del Polivalente en otra obra
Nostalgia, música y alegría. Mucha música y un profundo sentimiento amoroso. Así pasó el recuerdo de este año para Mariano Witis en la plaza 9 de Julio de Martínez, donde esta vez también se inauguró una escultura -El Principito- que creo el escultor, Martín Graziano, un compañero Mariano, para que las remembranzas del joven permanezcan por siempre en la plaza.
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Le cantaron sus amigos, su tío Mario y sus grupos vocales, sus compañeros del Poli de San Isidro, uno de sus maestros, el grupo La Fortunata, el Coro del Centro Polivalente de Arte de San Isidro. A través de esas voces Mariano volvió a estar vivo en la plaza de su niñez. Vivo como hasta hace 19 años. Raquel y Jorge Witis, sus papás, recuerdan siempre con música a Mariano.
El Principito, de Graziano
El 21 de setiembre de 2.000 Mariano Witis (23) fue víctima del gatillo fácil policial. En aquel hecho aberrante también fue fusilado sin oponer resistencia, otro adolescente, Darío Riquelme (16), que tenía a Mariano de rehén en el contexto del robo a un banco, pero ante la persecución policial se rindió. Raquel y Jorge buscaron justicia por Mariano, pero además por Dario, sin prejuicios.
La inauguración de la escultura de Martín Graziano para Mariano Witis
La plaza de Martínez se llenó de cantantes, pero también de referentes sociales y de derechos humanos; el abogado Pablo Llonto, el diputado nacional, Horacio Pietragalla; el dirigente de SUTEBA, Julio Ceresa; el padre Jorge Marenco, de Curas en Opción por los Pobres; Viviam Perrone, de Madres del Dolor; la titular de Derechos Humanos de Tigre, Verónica Caamaño.
Sebastián Rodríguez y Santiago Cardozo (guitarra) también le cantaron a Mariano
Es que Raquel y Jorge abrieron un camino. Tuvieron la claridad de culpar a quien debían, por el asesinato de Mariano. La política de mano dura del Estado, el gatillo fácil policial y el accionar cómplice de la fuerza. Desde la Comisión Memoria Verdad y Justicia Zona Norte, donde militan desde hace muchos años, también los acompañaron; y desde Baldosas por la Memoria también.
El tío Mario (canta en el centro) con sus grupos vocales también recordaron a Mariano
«Ellos -explicó Adriana Taboada, de la CMVJZN- pudieron reconocer, y esto hace a la esencia, quiénes son víctimas y quien agresor, en cada situación. Lo que le pasó a Mariano, como a tantos jóvenes, es que el problema no está en los que delinquen, sino en el Estado, que a través de sus agentes empuña un arma y dispara tanto la ciudadano común como al que está delinquiendo».
«El Estado -reafirmó la referente de la Comisión- lo que debe hacer con alguien que rompe la ley, es llevarlo a juicio con las pruebas que corresponda y aplicar la condena que corresponda. De ninguna manera puede matar a ciudadanos, no importa lo que estén haciendo, y además mentir, porque en el caso de Mariano quisieron hacerlo pasar como parte del grupo de ladrones».
Raquel y Jorge. «Ellos han hecho la diferencia en lo que es conjunto de los familiares de víctimas de violencia institucional», dijo Adriana Taboada sobre los papás de Mariano
Sobre la familia Witis, Taboada señaló: «Por suerte hay familiares con posibilidad educativa, y recursos simbólicos que les permiten llevar una lucha y ser escuchados, porque muchos en los sectores populares, quisieran hacer lo mismo y no van a tener la misma posibilidad de escucha. Acá se dieron una cantidad de elementos, pero además esa claridad que tuvo esta familia».
Y agregó: «Tiene que ver con el sistema de valores que ellos tienen, que les permitió tener una lente distinta frente a una muerte que pudo haber sido evitada. Ellos han hecho la diferencia en lo que es conjunto de los familiares de víctimas de violencia institucional». Cabe consignar que la escultura de Graziano buscaba su lugar desde 2012 y ahora lo tiene.
Raquel Witis reparte pines con la imagen de Mariano
Raquel y Jorge, en las redes sociales, advirtieron: «los actores judiciales cuando miran para otro lado, miden con doble vara y son benignos con los que portan uniforme o con el poder, y duros con pobres y personas en situación de vulnerabilidad, avalan y legitiman la violencia institucional» y volvieron a repetir como en la plaza: «Quien cuida y guarda la memoria, guarda y cuida la vida”.
Gustavo Camps
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