Un multitudinario acto, en la plaza frente al Congreso nacional acompañó el paro general del movimiento obrero organizado para rechazar el DNU Milei y su “ley ómnibus”. Fueron oradores los cosecretarios generales de la CGT, el camionero, Pablo Moyano, y el dirigente de la sanidad, Héctor Daer. También la Madre de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Taty Almeida; y el titular de la Confederación Sindical de las Américas (CSA), el brasileño, Rafael Freire. Hubo columnas de sindicatos, colectivos culturales, estudiantes, agrupaciones y partidos políticos y movimientos sociales.
Desde antes de mediodía la CABA comenzó a recibir las columnas de manifestantes para participar del acto central por el paro nacional convocado por las centrales de trabajadores CGT y CTA. La demostración busco visibilizar el descontento social, y de las y los trabajadores organizados, por el DNU Milei y su “ley ómnibus”.
Hubo representaciones de trabajadores y trabajadoras de gran cantidad de sindicatos . Como el de la construcción (OUCRA); el vidrio (SEIVARA); camioneros; estatales de UPCN y ATE, entre otros; Judiciales; docentes de SUTEBA y SADOP (privados); Ladrilleros (UOLRA); ferroviarios de La Fraternidad y la Unión Ferroviaria, y más.
También estuvieron los movimientos sociales de UTEP y los Trabajadores Excluidos MTE; la Federación Nacional de Campesinos; Libres del Sur. De la provincia estuvieron el gobernador Axel kicillof y el ministro Gabriel katopodis. Y no faltaron el secretario general de Ladrilleros, Luis Cáceres; el titular de SUTEBA, Roberto Baradel; y el judicial, Hugo Piumato
Hubo cuatro oradores, una hora antes de lo anunciado. Pues la plaza del Congreso y las inmediaciones estaban atestados de gente. En la desconcentración se tuvo que dejar de lado el protocolo antipiquete y los manifestantes llenaron las calzadas de Yrigoyen, Rivadavia y las transversales Rodríguez Peña, Paraná y Montevideo.
Documento conjunto
Se dirigieron a las y los presentes los cosecretarios generales de la CGT, el camionero, Pablo Moyano, y el dirigente de la sanidad, Héctor Daer. También la Madre de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Taty Almeida -sumamente reconocida y aplaudida- . Y el titular de la Confederación Sindical de las Américas (CSA), el brasileño, Rafael Freire.
Antes, la secretaria general del sindicato de docentes privados SADOP, leyó un documento criticó del DNU Milei y la ley ómnibus, “en defensa de los derechos civiles, sociales y laborales de nuestra Nación”. En el cual, primero se denunció que con el DNU se pretenden modificar más de 600 leyes votadas por el Congreso nacional.
“Ninguna crisis puede ser oportunidad para arrasar con los derechos fundamentales de todos los argentinos” señaló el documento también. Y puso de relieve que “no defendemos privilegios (…) sino el derecho a trabajar dignamente (…) a una remuneración digna” y “(…) a la protección social”, entre otros derechos.
El documento también advirtió que la ley ómnibus y el DNU “ponen en riesgo a las pequeñas y medianas industrias. Atropellan y desconocen garantías constitucionales , derechos colectivos y derechos laborales. Perjudican al comercio y al mercado interno. Ponen en riesgo la soberanía territorial, económica, alimentaria y ambiental”.
El documento, asimismo, exhortó a diputados y senadores “con independencia de los partidos políticos” donde pertenezcan a “fortalecerse con esta marcha multitudinaria para honrar el mandato político recibido y enfrentar con su voto la intención de quitarles poderes (del DNU y la ley ómnibus) y (desconocer) la Constitución Nacional”.
Intervenciones
Como resumen el documento advirtió que con sus avances “el gobierno busca romper el contrato social mediante políticas y reformas que solo buscan avasallar los derechos y las conquistas del pueblo argentino”. Y reafirma “nuestra convicción sobre la importancia del dialogo social” en aras del “desarrollo, la producción y el trabajo digno”.
Tanto Moyano como Daer apuntaron a las y los legisladores. Para que no voten medidas contra el movimiento obrero. “Cada vez que asume un gobierno liberal, ya lo sabemos, lo primero que ajusta es a los trabajadores”, advirtió asimismo Moyano, en su discurso. Y señaló algunos de los avances, públicamente conocidos (jubilaciones, ley de alquileres).
Daer, por su parte, destacó que “venimos a defender la democracia (…) la soberanía”. Más adelante acuso al gobierno de “utilizar la libertad para ajustar” pues, en definitiva, “todos los pueblos buscan su libertad”. También le reclamó al gobierno “no criminalizar la protesta social. Porque le va a costar en todo el mundo. Y en la Argentina”.
Acuso al gobierno de querer especular con el Fondo de Garantía de Sustentabilidad de los jubilados. Y en una crítica directa al presidente explicó “Una cosa es andar en camioneta con una motosierra y otra gobernar. Es necesario tener templanza. Es necesario asegurar el debate. Y es necesario tener equilibrio para poder gobernar”.
Mandato popular
Daer destacó que el gobierno, asimismo, “quiere destruir los sindicatos. Y nos quiere quitar la posibilidad de acción legal y sindical”. Particularmente reveló que el gobierno “va por la cultura también. Y en esta línea afirmó: “no es inocente atacar la cultura. Porque la cultura se inspira en nuestras raíces”.
El dirigente de sanidad también exhortó a los legisladores a “que actúen de acuerdo con el mandato popular”. Daer antes de concluir, destacó la presencia del dirigente brasileño, Rafael Freire. Reconoció la presencia de una multiplicidad de referentes sociales y políticos de todas las ideologías. “Todos vamos a seguir la lucha (…)”, advirtió.
La Madre de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Taty Almeida, valoró la unidad de las fuerzas sociales y políticas; y exhortó a “no bajar los brazos”. Con su voz característica estuvo entre las más aplaudidas, también por su compromiso. Freire reconoció cómo Brasil pudo desligarse de un ultraderechista como Bolsonaro, similar a Milei.
La desconcentración tuvo lugar alrededor de las 15,30. La gran cantidad de público dio por tierra con el protocolo. Las calzadas de Yrigoyen, Rivadavia y su transversales se llenaron de gente. No había policías que perturben el paso. Recién en las calles Perón o Sarmiento los manifestantes paraban ante los semáforos en rojo.
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