El bajista de Riff, Víctor “Vitico” Bereciartúa (75), la historiadora, Cristina Mirabelli y el sindicalista, Victorio Pirillo, se encontraron el La Farola, de Olivos. Hablaron de música y de, Vitico-El Canciller-Memorias, el libro que editorial Planeta acaba de publicar sobre varios pasajes de la vida del músico, relatados por él mismo. Pirillo – que además es guitarrista-, y Vitico, atesoran una larga amistad; y Mirabelli que los conoce a ambos no se perdió la oportunidad del encuentro.
En el escenario distendido del feriado por Semana Santa, Victorio Pirillo, Víctor “Vitico” Bereciartúa y Cristina Mirabelli, compartieron un café en La Farola, de Olivos. Allí celebraron el lanzamiento del libro Vitico-El Canciller-Memorias del reconocido y activo músico, bajista de Riff (la banda que compartió con el mítico “Pappo” Napolitano).
El rigor lo de “bajista de Riff” es solo el resumen de una larga carrera. Vitico, cuando aún no soñaba con ser Vitico, la comenzó antes de los 20 años. En Colegiales, su barrio de la juventud, con Los Mods, Los Vips y Alta Tensión, a fines de los años ´60. Desde 2014, asimismo, Vitico es Personalidad Destacada de la Cultura Nacional.
Pirillo que encabeza el sindicato STMVL y también es escritor, amén de guitarrista, y amigo de Vitico, junto a la historiadora Cristina Mirabelli, recibieron el libro de manos del autor. Lo hojearon y leyeron párrafos un buen rato. Y no faltaron pasajes jugosos que celebraron ante la mirada satisfecha del propio Vitico, café y anécdotas mediante.
Presente
“Todo lo que cuento en mi libro es verdad aunque muchos se horroricen y se molesten”, se escuchaba decir al músico y largar carcajadas cómplices con sus amigos. “Y está contado de forma poco tradicional, digamos, aunque podría haber sido mucho más irritante”, aseguraba con la mirada vaya a saber en qué recuerdos.
“Este libro lo hice como un presente para la gente. Porque quiero que conozcan la verdad que existe detrás del personaje. Y al hombre común, con mis defectos y mis virtudes, que soy en lo cotidiano”. Tanto Pirillo como Mirabelli escuchaban atentos, preguntaban y opinaban. Y así pasaron un largo rato de camaradería.
“Me reconforta entregarle a mi amigo personal, Victorio, que también fue un gran amigo de Pappo este ejemplar que tanto significa para mí”, le dijo Vitico a un periodista local que reconoció a los comensales y se acercó. “Puedo decir que estoy contento con lo logrado y me siento satisfecho con haber podido terminar con este libro en donde puedo contar con libertad, mi vida”, señaló.
" EL NEGRO OJEDA"
Tres grandes seres de estos días son muy buena gente y es muy bonito verlos juntas, hay muy lindos seres, como ellos, que hermoso verlos juntos y tengan una feliz pascua¡¡¡¡¡¡