La Justicia federal rechazó el reclamo de una cámara empresaria para volver a comercializar pirotecnia en Tigre, informó la comuna. La jueza Martina Isabel Forns desestimó una medida cautelar solicitada por la Cámara Argentina de Empresas de Fuegos Artificiales (CAEFA). La demanda pretendía interrumpir la ordenanza municipal que protege de los efectos de la pirotecnia, y cohetería sonora, a personas con TEA, niños y adultos mayores, mascotas y fauna en general.
La Justicia federal rechazó el reclamo judicial de una cámara empresaria para comercializar pirotecnia en Tigre. La Cámara Argentina de Empresas de Fuegos Artificiales (CAEFA) pretendía utilizar una herramienta jurídica eludir una política municipal de protección para ciudadanos y mascotas y fauna en general.
Martina Isabel Forns, jueza a cargo del Juzgado Federal en lo Civil, Comercial Contencioso Administrativo N° 2 de San Martín, desestimó la petición de CAEFA. Entre los argumentos expuestos por el Municipio de Tigre, la magistrada tuvo especial consideración en los perjuicios que generan los estruendos pirotécnicos.
Efectos negativos
Los ruidos molestos y nocivos atentan contra las personas que padecen Trastornos del Espectro Autista (TEA). Además, destacó la comunicación municipal, producen efectos negativos en el ambiente –producto del alto grado de probabilidad de incendios-, y daños sobre la flora y fauna, señaló la información municipal.
Desde julio de 2022, por ordenanza municipal, en Tigre está prohibida la utilización, comercialización, detonación, tenencia, acopio, depósito, exhibición y también, la fabricación de pirotecnia y cohetería con efecto sonoro. La medida incluye la actividad mayorista y minorista, y tuvo el impulso del intendente local, Julio Zamora.
El primer antecedente de esta normativa data de 2019 informó el municipio. Cuando Zamora decretó la suspensión del uso de fuegos artificiales en actos oficiales y espectáculos públicos del municipio. Por caso, en la tradicional fiesta religiosa de la Virgen (8 de diciembre), los fuegos artificiales se reemplazaron con juegos lumínicos.
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