La Asociación de Sobrevivientes Familiares y Compañeros de Campo de Mayo anunció una manifestación de protesta el miércoles 13, a las 14, en el lugar. El Negrito Floreal Avellaneda tenía 15 años cuando bandas de la última dictadura lo secuestraron y torturaron junto a su madre, en Munro. Luego apareció asesinado. Su caso abrió las causas de terrorismo de Estado que se tratan en los Juicios de Campo de Mayo. La semana última volvieron a atacar el recordatorio emplazado junto a la señalización de El Campito, el centro clandestino de secuestros y exterminio de opositores que funcionó en Campo de Mayo durante la última dictadura cívico militar; donde vieron con vida, por última vez a El Negrito.
En la Escuela N° 10 de Munro, donde Floreal El Negrito Avellaneda terminó la escuela primaria hay una placa que lo recuerda. Su caso es tristemente paradigmático en el accionar de las fuerzas represivas de la última dictadura cívico militar; pues El Negrito tenía 15 años cuando lo secuestraron, torturaron; y luego apareció asesinado.
La última dictadura persiguió con saña a la familia Avellaneda por su lucha. Mamá Iris Pereira de Avellaneda fue secuestrada y encarcelada, junto a su hijo Floreal El Negrito. Buscaban a papá, Floreal Avellaneda, un delegado con gran compromiso social, de la fábrica Tensa en Vicente López. Los tres militaban en el PC.
El Negrito fue asesinado; su cuerpo apareció en las costas uruguayas. Pero se lo vio vivo por última vez en la guarnición militar de Campo de Mayo; donde durante la dictadura cívico militar funcionaron al menos cuatro centros de tortura y exterminio de opositores políticos al régimen que asoló el país entre 1976 y 1983.
El repudio
Papá Floreal falleció en 2010; e Iris continuó y continúa la militancia y la lucha. Actualmente preside la Liga Argentina por los Derechos Humanos LADH. Y en 2020 fue reconocida, junto a otras referentes de derechos humanos del país, con el Premio Anual «Azucena Villaflor de De Vincenti», que otorga el Poder Ejecutivo Nacional.
La semana última, el sábado 8, un recordatorio de Floreal El Negrito Avellaneda, que se levanta a la entrada de El Campito, uno de los ex centros clandestinos –pero muy importante pues es el único señalizado de Campo de Mayo-, fue vandalizado con pintura. No es la primera vez, reveló la organización de derechos humanos.
En este contexto, desde la Asociación de Sobrevivientes Familiares y Compañeros de Campo de Mayo repudiaron el ataque y señalaron que “Es feroz el ensañamiento que tuvieron y tienen contra este joven y su recuerdo. En el vuelcan toda su furia servil a intereses mezquinos, patronales”. Además manifestaron que el recuerdo no cesará.
La lucha no cesará jamás

En una comunicación escrita con lenguaje inclusivo, donde además se pone en evidencia que la represión alcanzó a por lo menos 400 personas de diversidad sexual la asociación advirtió: “(…) No podrán. Una y otra vez colocaremos este recordatorio. Porque recordando a El Negrito reivindicamos su lucha, la lucha de los 30400“.
En la comunicación, asimismo, se enfatiza en que se trata de “principalmente la lucha de nuestros jóvenes. Que no cesará jamás contra la injusticia que nos impone este sistema de odio; y contra el cual lucharon todos nuestros compañeros detenidos desaparecidos y los sobrevivientes”.
La asociación, además, convocó a una manifestación para este miércoles 13, a las 14, donde se señaliza oficialmente El Campito; y se recuerda a El Negrito Avellaneda. El encuentro será en la esquina de Roca e Ideoate, en la ruta que recorre el campo militar, donde se señaliza el ex centro clandestino a un kilómetro y medio de distancia.
Gustavo Camps
Dejar una respuesta