No hace mucho, en el verano de 1987, febrero, el poeta Vicente Zito Lema, director periodístico de la revista, Crisis (Nº 51), escribia un duro pero descriptivo editorial sobre lo que aquejaba al pais en su incipiente democracia tras la última dictadura cívico militar. “La cruel realidad argentina”, era el título. Si uno lo lee hoy encontrará conmovedoras analogías. El comentario viene a cuento porque el abogado Prado, en su columna, observa que cuestiones como el uso de las tecnologías para explotar, o la represión, siempre son tema candente, y repetitivo, en estos siglos de capitalismo que sufrimos.
Por Juan José Prado*

El avance de la tecnología siempre ha inquietado al poder. Me entretuve comparando cómo inquietaba a los centros burgueses hace tiempo, y a los que hoy se consideran conductores de lo que denominan “el gran dilema del Siglo XXI”. El triste slogan de Margaret Thatcher, “There Is No Alternative”, TINA, del cual pocos se vanaglorian en público, actualmente, puede dar una idea de hacia dónde dirijo mi reflexión.
En 1887 Paul Lafargue nos hacía saber de cómo reaccionaba la burguesía dueña del Poder frente al avance del pueblo, “(…) el avance del socialismo -señalaba- preocupa a las clases propietarias de Europa y América». Hace unos meses, hombres de todos los países civilizados se reunieron en Londres para “buscar juntos los medios más efectivos para detener la peligrosa invasion de las ideas socialistas…”.
Grandes industriales y financistas -Vanderbilt, Rotschild, Gould, Subeyran, Krupp,Dllfus, Dietz-Monnin, Scheider- asistieron en persona. O fueron representados por hombres de su confianza, al congreso en Londres. Nunca antes se habían visto personas de opiniones y nacionalidades tan diferentes reunidos tan fraternalmente. Paul Bert se sentó junto al obispo Freppel, … y así. La causa que los unía impuso el silencio sobre sus rencores personales, sus divisiones políticas y sus celos patrióticos.
El primero en hablar fue el enviado del Papa de entonces:
“…Gobernamos a los hombres utilizando al mismo tiempo la fuerza bruta y la inteligencia. La religión fue una vez la fuerza mágica que dominó la conciencia del hombre. Enseñó al trabajador a someterse obedientemente, a dejar ir la presa en la oscuridad, a soportar las miserias terrenales mientras sueña con los placeres celestiales. Pero el socialismo, ese espíritu maligno de los tiempos modernos, expulsa la fe y se establece en el corazón de los favorecidos. Les predica que no debemos relegar la felicidad al otro mundo, les anuncia que hará de la tierra un paraíso, le grita al asalariado.
“Te están robando” ven levantate y despierta. Está preparando a las masas trabajadoras…para una insurreccion general…abolirá las clases privilegiadas, reprimirá la familia, quitará sus bienes a los ricos y se los dará a los pobres y así destruirá a los pobres, el arte la religión, esparciendo la oscuridad de la parbarie por el mundo,,,¿Cómo combatir al enemigo de toda la civilización y de todo progreso?
La ola que viene
Mustafa Suleyman en su libro, Tecnologia, Poder y el Gran Dilema del Siglo XXI (Penguin Random House 2023), nos introduce mediante un glosario de términos clave, a conocer sobre nuestro destino, como sociedad universal ante el avance de la tecnología y sobre todo de la inteligencia artificial
Las comparaciones nos hacen concluir en que el hombre nada ha cambiado en cuanto a su concepción del Poder y el menosprecio a las masas trabajadoras. La burguesía de ayer no difiere de la de hoy. Transcribo parte del glosario para despertar el interés en indagar sobre él y sobre el libro de marras.
Suleyman señala:
EL CAMINO ANGOSTO: la posibilidad de que la humanidad establezca un equilibrio entre una actitud receptiva y cerrada a la hora de contener las tecnologías de la ola que viene que evite resultados catastróficos o distópicos.
AMPLIFICADORES DE LA FRAGILIDAD; aplicaciones e impactos de las tecnologías de la ola que viene SACUDIRÁN los ya FRÁGILES cimientos del Estado Nación.
AVERSION AL PESIMISMO: la tendencia de las personas, sobre todo de las élites, a ignorar, infravalorar o rechazar las narrativas que consideran excesivamente negativas. Es una variante del sesgo optimista que tiñe gran parte del debate sobre el futuro, sobre todo, en círculos tecnológicos.
El Gran Pacto
En igual línea nos hace referencia a: Biologia sintetica; Contención, refiriéndose a la capacidad de supervisar, restringir controlar incluso paralizar las tecnologías. Agrega el Dilema: la creciente probabilidad de que tanto las nuevas tecnologías como la ausencia de estas pueda conducir a resultados catastróficos o distópicos, o ambos.
Concluyendo con El Gran Pacto: a cambio de un monopolio sobre el derecho a utilizar la fuerza, los ciudadanos esperan que los Estados Nacion preserven el orden y ofrezcan servicios públicos, incluso aprovechando las nuevas tecnologías y minimizando al mismo tiempo los efectos los efectos secundarios perjudiciales.
En los tiempos de Laforgue hay que dar palo a las masas, para permitir manejar el poder. En 2025 Suleyman nos hace saber que solo con la fuerza podrán imponer la tecnología que sustente el poder. La tecnología del siglo XIX no es la del XXI. Entre los los dueños del poder me ha parecido encontrar aspectos, rasgos comunes.
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