Diferentes organizaciones sociales, agrupaciones políticas y de diversa índole social intentaron marchar hoy lunes al lago Escondido, por el camino de Tacuifí. El marino Julio Urien, presidente de la Fundación Interactiva para Promover la Cultura del Agua-FIPCA, y otros referentes ultimaban los últimos detalles de la marcha. Se encontraron en un acampe del Barrio Luján, con gran cantidad de manifestantes. Sin embargo no pudieron acceder al camino público.
Sin éxito gran cantidad de manifestantes de organizaciones sociales y políticas intentaron llegar al Lago Escondido por el camino de Tacuifí. Un gran portón de hierro macizo, cerrado con candado, y con alambres de púa en la parte superior se los impidió. La Justicia de Rio Negro, no obstante, había ordenado abrir el camino.
“La apertura del camino de Tacuifí la ordenó la Justicia. Con eso se termina con la cueva. Porque permite que cualquier ciudadano con el un vehículo en 40 minutos pueda llegar al lago”, explicaba por la mañana del lunes el presidente de la Fundación FIPCA, Julio Urien, un marino que lucha por la soberanía.
Detrás de portón había policías de Río Negro, una gran bandera de la Argentina colgada a media altura que barría el suelo, detrás de ella un grupo de jinetes, vestidos o disfrazados con ropa de gaucho, otras personas de civil los rodeaban, y un parlante propalaba música folklórica a todo volumen -que asustaba a los caballos incluso-.
Pegado al férreo portón un cartel marrón sobre el camino público decía “Camino Rural Privado” y estaba “firmado” al pie por una “Comisión de Fomento de El Manso”. Era bastante curiosa la situación dado que la Justicia de Río Negro determino que ese paso cerrado por esta “comisión” es público y debe permitir el acceso.
Policías y caballos
En la parte de afuera había más policías, algunos de azul oscuro, y un par de más edad y ropas grisáceas que daban la impresión de estar a cargo de todo. Con Urien, Magdalena Gaguey y otros referentes de las organizaciones las columnas con un número importante de manifestantes se aprestaron a marchar.
Previamente Urien y otros dirigentes dialogaron con las autoridades policiales -que prefirieron no dar sus nombres al periodismo- y les explicaron que querían ir al Lago Escondido por ese camino público y les pidieron a los encargados policiales que intervengan. Las columnas esperaban ordenadas para poder avanzar libremente.
Los agentes policiales les aseguraron a Urien y a los otros que estaban allí para “guardar” la seguridad de los transeúntes y los vecinos. Tanto Urien como al menos otros dos dirigentes les explicaron que el camino es público. Luciano Orellano -de la Mesa Coordinadora por la Recuperación del Paraná- fue muy elocuente y claro.
El Foyel o Lewis Town
La policía rionegrina en definitiva no hizo nada. Las columnas, entonces, se acercaron al portón y expresaron cánticos contra el magnate inglés Joe Lewis, que se apropió del Lago Escondido, y les paga a algunos lugareños para que actúen como fuerza de choque contra turistas, vecinos y visitantes que quieren llegar al lago público.
Según lo que se desprende de comentarios de vecinos nada se hace en la zona de El Foyel, sin que Lewis lo autorice. La barriada depende administrativamente de El Bolsón, pero allí rigen las disposiciones de Lewis. “Son jodidos esos tipos”, dijo un joven lugareño que prefirió no dar su nombre, “y ustedes (sic) vienen hoy y se van. Nosotros nos quedamos”.
Al menos tres veces las columnas se mantuvieron firmes junto al portón de hierro para expresar claramente que querían pasar. Pero nada ocurrió del otro lado. De a ratos aparecía del fondo del camino a gran altura un dron que se posaba sobre las comunas y se retiraba raudo cuando era advertido por los manifestantes.
A Bariloche
Tras los intentos Urien pidió a los manifestantes que se retiren del portón y cesen los pedidos. El marino que encabeza FIPCA informó que el martes 31 interpondrá un recurso de amparo en el Juzgado Civil Nº 3, con sede en Bariloche, para que la Justicia por enésima vez -esta es la séptima marcha- ordene el paso.
Por la mañana, en una rueda de prensa Urien había explicado que el paso de Tacuifí, al ser el más directo al lago público, es el que debe quedar abierto. “En cambio por el camino de montaña necesitas más de una semana. Preparación física. Y no todas las personas lo tienen”. Para Urien es clave que se abra al público ese camino.
“Igualmente -destacó no obstante el marino que preside FIPCA- aunque dicen “vayan por el camino de montaña”, ellos nos bloquean igual. Por eso es tan central Tacuifí. Porque entonces el Lago Escondido pierde esa imagen de cueva y las y los ciudadanos pueden entrar libremente”. Mañana martes debe decidir la Justicia.
Gustavo Camps
Desde El Bolsón
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